Economía y Hacienda incorpora el sistema de información contable SIC-3 que ahorrará más de 10 millones a las arcas regionales

13/07/20


María Sánchez con parte del equipo de su Consejería. (Foto: Raúl Lucio)

La Consejería de Economía y Hacienda ha incorporado el sistema informático de información contable SIC-3, lo que supondrá para las arcas de la comunidad autónoma un ahorro de más de 10 millones de euros y supone, según la consejera, María Sánchez, "un paso más hacia la modernización y la transparencia en la gestión pública".

La titular de Economía ha felicitado a los funcionarios de contabilidad y tesorería por la implantación de este sistema, ya que de esta forma se cumple el fin buscado por el convenio de colaboración entre la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) y el Gobierno regional de adhesión al sistema de información contable de la Administración General del Estado, cuyo objetivo era fijar un marco de colaboración entre ambas administraciones y aprovechar la experiencia del Estado en el sistema de información contable.

Asimismo, María Sánchez ha destacado la importancia de crear sinergias entre las distintas administraciones públicas para favorecer "la eficiencia en la gestión y el ahorro de costes" y el SIC-3 es "un buen ejemplo" de ello , ya que según la consejera, implica para el Gobierno de Cantabria una gestión contable "más eficaz, transparente, accesible y mesurada en el gasto".

La implantación de este sistema ha sido fruto de un intenso trabajo liderado por la Consejería de Economía y Hacienda a través del área de contabilidad y el área de tesorería de la propia Consejería, con la colaboración estrecha de la Dirección General de Organización y Tecnología, lo que ha supuesto un buen ejemplo de desarrollo de proyectos de manera eficiente por parte de funcionarios de la propia Administración de la Comunidad Autónoma de Cantabria y de trabajo en equipo entre sus diferentes órganos administrativos.

A su vez, la Comunidad Autónoma podrá disponer de unas cuentas públicas más transparentes y de una gestión económico-financiera más eficiente, que facilitará la tarea de toma de decisiones a nivel presupuestario, acercará las cuentas públicas a los ciudadanos y hará más asequible y mesurable el control de los caudales públicos.