Concluye el asfaltado de las calles Ataúlfo Argenta y Gándara

22/05/19


El plan de asfaltados que está desarrollando el Ayuntamiento de Santander ha finalizado ya los trabajos en las calles Ataúlfo Argenta y Gándara, donde se ha restablecido totalmente el tráfico y el aparcamiento.

Ahora, los equipos de trabajo se trasladarán a la zona de El Campón, en Peñacastillo, tal como ha informado el concejal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda, César Díaz, quien ha precisado que mientras se desarrollen estas labores se tratará de minimizar las afecciones a los conductores.

Tanto los asfaltados que acaban de finalizar en las calles Ataúlfo Argenta y Gándara, como el que se acometerá a continuación en El Campón, forman parte de un plan que contempla intervenciones en casi 40 viales repartidos por distintos barrios.

Hasta la fecha se ha actuado en las calles Augusto González Linares, Honduras, La Peseta, la avenida de Nueva Montaña, la avenida de Los Infantes, las calles Santa Teresa, Francisco Palazuelos, Prado San Roque y María Cristina, Tetuán y Barrio Camino, Canalejas, Alta, Habana, Argentina, Montevideo, Alcázar de Toledo, Ataúlfo Argenta y Gándara.

Y sucesivamente se irá interviniendo también en otras zonas, incluidos viales utilizados a diario por numerosos conductores, como la calle Castilla o las glorietas de Puertochico y Galicia (calle Alcalde Vega Lamera).

Asimismo, se asfaltarán, además del barrio El Castro (en el polígono del Campón), las calles Atilano Rodríguez, Vargas, Marqués del Arco y Obispo Sánchez de Castro, Rualasal, San José, Sevilla, Guevara, Pancho Cossío, Barcelona y Virgen del Camino.

Las obras se inician en todos los casos con la demolición y reposición del firme en las zonas deterioradas e incluyen también el fresado, levantamiento y nivelación de las tapas de arquetas y registros, y ejecución de los cruces de calzada necesarios para los servicios afectados (alumbrado, semáforos…).

Igualmente, se procede al bacheo, reperfilado y refuerzo de la calzada en las zonas necesarias y se termina con la extensión de una capa de rodadura de 5 centímetros de espesor.

Además, en los puntos en los que es necesario, se actúa en el drenaje superficial y también en algunos tramos de acera, además de instalar hidrantes y bandas reductoras de velocidad.

El plan, que tiene un presupuesto de más de 1,4 millones de euros, cuenta con una subvención del Gobierno de Cantabria dentro de la convocatoria para municipios realizada a través del Decreto 50/2017, de 20 de julio de 2017.