El Ayuntamiento y el Estado formalizan la cesión del Archivo Histórico a Santander

La alcaldesa y la delegada Economía y Hacienda en Cantabria han rubricado este jueves el acuerdo de cesión del inmueble al Consistorio, lo que permitirá acondicionar en este espacio la nueva Biblioteca Municipal, una actuación que cuenta con un presupuesto de 1.838.054 euros.

El Ayuntamiento de Santander y el Ministerio de Hacienda han formalizado la cesión del antiguo Archivo Histórico y Provincial a la ciudad con el fin de acondicionar en este espacio la nueva Biblioteca Municipal, una actuación municipal que cuenta con un presupuesto de 1.838.054 euros.

La alcaldesa Gema Igual y la delegada especial de Economía y Hacienda en Cantabria Ana Jiménez han suscrito este jueves el acuerdo de cesión del inmueble al Consistorio, de cara a su rehabilitación y el traslado de la biblioteca.

Igual ha agradecido al Estado los trámites realizados para ceder este edificio a Santander y ha asegurado que este acuerdo supone un paso importante en el desarrollo del proyecto cultural de La Florida, ya que permitirá liberar los espacios que ocupa actualmente para destinarlos a nuevos usos culturales.

El traslado de la Biblioteca significará la modernización completa de sus instalaciones y potenciarla no sólo como espacio para la lectura, sino también para otras actividades como talleres, cuentacuentos, clubes de lectura e incluso pequeños actos públicos.

Según ha destacado, el Ayuntamiento de Santander avanza con paso firme en el proyecto, cuyas obras ya están en fase de adjudicación y se iniciarán próximamente.

Los técnicos están analizando las siete ofertas recibidas para ejecutar las obras que permitirán impulsar los usos y actividades de la Biblioteca Municipal atendiendo las necesidades actuales de los usuarios.

El proyecto tiene como objetivo recuperar el antiguo edificio del Archivo Provincial, obra del arquitecto de la Diputación Regional, Ángel Hernández Morales, que data de los años 50 y  tiene una superficie de más de 1.000 metros cuadrados distribuidos en cuatro plantas.

Se creará un espacio que compatibilice y permita el trabajo en equipo, con zonas de lectura atractivas, espacios de lectura infantil ya sea individuales o de cuentacuentos, áreas de acceso informático, lectura de prensa, etcétera.

La planta baja, de algo más de 470 metros cuadrados, estará dedicada íntegramente a la lectura, tanto de adultos como infantil.

Además, se proyecta un pequeño volumen en la fachada norte, a favor de la pendiente del terreno, destinado a anfiteatro y con capacidad para unas 40 personas.

Por lo que respecta a la planta primera, se dispondrá de un aula y varios espacios de trabajo en grupo, con conexiones de portátiles a internet.

En las dos plantas restantes se sitúan los depósitos y las áreas de administración y dirección.

Por último, se habilitará la terraza como espacio público plenamente accesible, lo que permitirá organizar actividades de lectura al aire libre, pequeños conciertos o actuaciones, disponiendo para ello una grada perimetral.

La instalación de un nuevo ascensor permitirá acceder a la cubierta, a la que también se llegará mediante una escalera exterior desde la última planta.

Además, en el exterior, se prevé reurbanizar el espacio de acceso al sur, entre la sede de la Fundación Gerardo Diego y el propio edificio, cubriéndolo con unos toldos tipo vela con el fin de acercar y hacer más cómodo el acceso desde la calle Gravina.

Y el patio trasero, entre el edificio y la casa número 17 de la calle Cisneros, se ajardinará, permitiendo su acceso desde el vestíbulo como prolongación exterior del mismo. Se trasforma así en un espacio de utilidad al servicio de la nueva Biblioteca.

En el presupuesto del proyecto se incluyen, además de las obras de acondicionamiento del edificio y el refuerzo de la estructura, el mobiliario y el traslado de la biblioteca y sus depósitos actuales.